Importante identificar cómo llega la contaminación por plásticos al mar
Cada minuto se vierte en el océano el equivalente a un camión de basura de plástico.
Esta basura marina y la contaminación por plásticos ponen en peligro la vida acuática, amenazan la salud humana y suponen innumerables costes ocultos para la economía. Esta amenaza global requiere una respuesta global, y la próxima Asamblea de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (UNEA 5.2) es un escenario importante para que los gobiernos y los responsables políticos catalicen el cambio.
De acuerdo con el informe del PNUMA: De la contaminación a la solución, la basura marina y la contaminación por plásticos pueden alterar los hábitats y los procesos naturales, reduciendo la capacidad de los ecosistemas para adaptarse a la crisis climática. Esto afecta los medios de vida, la seguridad alimentaria y el bienestar social de millones de personas. Se necesita una acción urgente y multilateral para identificar dónde entran los residuos plásticos en las vías fluviales y, para optimizar los cambios en las políticas sobre la producción y el uso del plástico, es importante identificar cómo llega la contaminación por plásticos al mar.
De los 11 millones de toneladas de contaminación por plásticos que se calcula que entran en el océano cada año, hasta 2.7 millones de toneladas proceden de los ríos.
En América del Norte, a través de la Iniciativa sobre la Contaminación por Plástico del Río Mississippi, el PNUMA se compromete con la ciencia ciudadana al trabajar con miles de voluntarios de la comunidad para rastrear, aguas arriba y en la costa a lo largo del río, los datos de la contaminación por plásticos. Estos datos se recogen mediante una aplicación móvil gratuita y de código abierto llamada Marine Debris Tracker.
En el sudeste asiático, el proyecto CounterMEASURE del PNUMA identifica las fuentes y vías de contaminación por plásticos en los sistemas fluviales, especialmente en el Mekong y el Ganges. Con el uso de tecnologías y enfoques innovadores como los SIG, el aprendizaje automático y los drones, el proyecto ha desarrollado modelos de fugas de plástico para localidades de seis países que pueden ser ampliados y reproducidos en todos los continentes.
Los riesgos ambientales, sociales, económicos y sanitarios de los plásticos deben evaluarse junto con otros factores de estrés ambiental, como el cambio climático, la degradación de los ecosistemas y el uso de los recursos.