Demandan a AMLO “estrategia emergente” para enfrentar efectos en agro de guerra Rusia-Ucrania
Organizaciones privadas y del sector social demandaron al presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, instrumentar y aplicar una estrategia emergente para hacer frente a la “tormenta perfecta” que está generando la guerra Rusia-Ucrania, con el alza de los fertilizantes y su posible impacto en el costo de alimentos.
El secretario General de la Unión Nacional de Trabajadores Agrícolas (UNTA), Álvaro López Ríos, advirtió que el alza de precios de fertilizantes, semilla y otros insumos podría limitar la producción del ciclo primavera-verano 2022 y generará el inicio de una “catástrofe agroalimentaria”.
Puntualizó que en promedio, los precios de fertilizantes registraban hasta la primera semana de marzo un incremento anual del 89%; sin embargo, con el alza de precios de la última semana alcanzó un incremento de 126%, debido a la tendencia alcista provocada por los precios de la energía (gas natural), en los costos de los fletes marítimos, y al conflicto bélico entre Rusia y Ucrania.
Para el corto plazo se prevé un fuerte incremento en los precios de estos insumos, ante la suspensión de exportaciones por parte de Rusia en repuesta a las sanciones impuestas por países occidentales. El efecto inmediato sería en el potencial de rendimiento de las cosechas del ciclo P-V 2022, alertó.
Detalló que la producción nacional de fertilizantes cayó en 2021 11.3%, al ubicarse en alrededor de 2.1 millones de toneladas, de las cuales 47% fue de fosfatados, 27% ácidos y 26% de nitrogenados.
Con cifras del SAT, INEGI y FAO, señaló que
de los 5.4 millones de toneladas de fertilizantes que se consumieron en México durante 2021, 62% se cubrió con importaciones, lo que indica el alto de grado de dependencia del mercado exterior.
Rusia fue el principal proveedor de las 3.4 millones de toneladas de ferilizantes importadas durante 2021, con una participación del 27% (912 mil toneladas). De este volumen, 33% fue de Urea. En tanto, China abastece 20.4% de las compras nacionales de estos insumos, principalmente Urea.
López Ríos recordó que los precios de la canasta básica aumentaron 13.1% al cierre de febrero 2022 contra 11.8% de enero 2022.
Por su parte, el director de Protección de Cultivos, Ciencia y Tecnología (PROCCYT), Cristian García de Paz, señaló que el aumento en los precios de los fertilizantes, en algunos casos de hasta 300 por ciento, está teniendo dos consecuencias graves: la primera, la gente está dejando de cultivar sus tierras; la segunda, habrá escasez de alimentos, por lo que su precio será más alto.
En tanto, el presidente de la Unión Mexicana de Fabricantes y Formuladores de Agroquímicos (UMFFAAC), Luis Eduardo González Cepeda, resaltó que “los más afectados por el aumento de fertilizantes son los pequeños propietarios, tenemos reportes preocupantes de agricultores que han reducido la dosis de fertilizantes de un 30 hasta un 50 por ciento y en el bajío han disminuido la superficie sembrada, ante la incertidumbre de los precios en que venderán sus cosechas y que estiman que ni el gobierno, ni los costos de producción, les garantizan los rendimientos necesarios, así que mejor han dejado de arriesgar el poco capital que tienen”.
La industria de protección de cultivos recordó que el aumento de los precios de los fertilizantes se debe a varios factores que afectan la cadena agroalimentaria a nivel mundial, menor capacidad de movilización de contenedores desde China, el segundo exportador mundial, el aumento en el precio de los fletes marítimos, el incremento en los precios del gas natural (principal materia prima para los fertilizantes nitrogenados) que en Estados Unidos y Europa fue de más de 600 por ciento el año pasado y factores asociados al cambio climático, como sequías.
Propusieron al gobierno federal instalar centros de distribución donde los pequeños productores tengan un precio especial en los fertilizantes.
Por otra parte, el dirigente de la UNTA que en 2021 las importaciones de granos y oleaginosas finalizaron en un récord de 38.7 millones de toneladas métricas, 10.8% más que en 2020. El valor de estas registró un incremento de 56.5% con un récord de 15 mil millones de dólares.
El encarecimiento de insumos hará imposible la siembra para quienes trabajamos en la producción de alimentos, anticipó Álvaro López.
