Ante mayor producción de azúcar; México deberá exportar más…
Para el ciclo azucarero 2021/2022 la expectativa de producción de azúcar en México es de 6.1 millones de toneladas, por lo que se abre la necesidad de mayores exportaciones, que serían de poco más de 2 millones 317 mil toneladas y representaría alrededor del 43.4% más que en el ciclo anterior, refiere el Servicio de Información Agroalimentaria y Pesquera (SIAP).
En la publicación Expectativas Agroalimentarias 2022 indica que la producción del endulzante para el presente ciclo será 397 mil toneladas más que el periodo anterior –cuando sumó 5 millones 715 mil 448 toneladas.
El organismos dependiente de la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (Sader) anota que los inventarios finales estimados para el ciclo 2021/22 son de 903 mil toneladas, 14.2% menos que en el periodo precedente.
Según el Programa Nacional de la Agroindustria de la Caña de Azúcar 2021-2024 (PRONAC) el ciclo pasado se destinaron un millón 162 mil 252 toneladas a la exportación y 4 millones 386 mil 867 al mercado nacional.
Del total de exportaciones 76.7% se envía hacia el mercado de Estados Unidos y 23.3% hacia otros mercados (resto del mundo).
Con la competencia con otros edulcorantes, en los últimos 10 años la agroindustria ha visto limitadas sus posibilidades de desarrollo y de mantenerse la tendencia presentada en esta segunda década del siglo XXI,
la agroindustria de la caña de azúcar podría enfrentar una crisis de sobreproducción y bajos precios, debido a la sustitución y cambio en los hábitos de consumo, con el consecuente riesgo de baja rentabilidad en esta actividad agroindustrial, lo que afectaría directamente a los productores de caña y más de 2 millones de personas que dependen directa o indirectamente de dicha actividad”, señala el PRONAC.
La agroindustria de la caña de azúcar –destaca– es un importante motor económico de México, con más de 800 mil hectáreas cultivadas con caña de azúcar en más de 267 municipios de 15 entidades del país. Ha sido una opción productiva para trabajadores rurales y es la cadena de valor agroindustrial de mayor importancia dada su relevancia económica, social y ambiental. La actividad primaria de producción de caña, su industrialización en los ingenios azucareros y la comercialización de sus productos, subproductos y derivados, genera una gran cantidad de empleos.