Vigilan cuerpos de agua en Tabasco para evitar muerte de manatíes
Para evitar la muerte de manatíes (Trichechus manatus) en Tabasco, debido a las condiciones de los cuerpos de agua, como ocurrió en 2018, se realizan recorridos de prospección, así como monitoreos y vigilancia en los diversos cuerpos de agua de la región. Además, se han establecido sitios de muestreos de parámetros físico-químicos de agua en la zona de interés, los cuales se llevan a cabo de manera mensual.
La Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) convocó a los actores vinculados con la Red de Atención a Contingencias por Varamientos de Marinos a fin de retomar y fortalecer las tareas que se venían realizando conforme a lo establecido en el Protocolo de atención correspondiente.
Asimismo, señaló la dependencia, se han establecido campamentos de atención inmediata para los decesos, se colocaron comederos en sitios estratégicos y se efectuó la disposición final de organismos, entre otras actividades relacionadas.
Los estudios y análisis de laboratorios que en su momento ejecutó el comité científico, integrado por cerca de 80 expertos de 30 instancias, para determinar las causas de los decesos de al menos 72 ejemplares de manatíes, coincidieron en que fue un proceso multifactorial que incluyó condiciones ambientales y fisicoquímicas, así como presencia de contaminantes y florecimiento de algas nocivas generadas por cianotoxinas.
Cabe destacar que en ese momento un estudio elaborado por la Agencia de Seguridad, Energía y Ambiente (ASEA) no encontró altos niveles de compuestos relacionados con hidrocarburos que determinaran la posible causa. Por otra parte, el análisis realizado por el Instituto Mexicano de Tecnología del Agua (IMTA) determinó presencia de dichas toxinas producidas por algas. Estas algas pueden proliferar y potenciar el fenómeno, entre otros factores, por el exceso de aporte de químicos por las actividades agrícolas forestales y ganaderas, descargas de aguas residuales, excesivo aporte de materia orgánica por los cambios de uso de suelo, incendios agrícolas y forestales, y los tapes por el exceso de lirio acuático.
Para llegar a esta resolución se realizaron análisis de calidad y toxicidad del agua, sedimentos, y vegetación, así como necropsias de algunos cadáveres y estudios de patologías, toxicología, bacteriología y virología. Cabe señalar que, en su mayoría, los cuerpos de los ejemplares hallados presentaban avanzado estado de descomposición, lo que dificultó en primera instancia determinar la causa de los decesos, además de no presentar evidencia de algún daño antropogénico.
Cabe recordar que durante el 2018 se contabilizó la mortandad de 53 ejemplares en diversos cuerpos de agua de los municipios de Macuspana, Centla, Jonuta y Paraíso; en 2019 se registraron 19 decesos, incluyendo en el municipio Centro; 5 en 2020, 19 en 2021 y 20 en 2022. Durante el 2023, a la fecha se han registrado 28 organismos sin vida, informó la Semarnat.
Los cuerpos de los sirénidos se han encontrado en su mayoría en avanzado estado de descomposición lo que ha dificultado la identificación de la causa de los decesos, sin embargo, en algunos de los casos se han logrado observar evidencia que pudiera sugerir que existe la influencia directa del hombre.