Legislación de México no afecta comercio de maíz amarillo de EU: Cibiogem
El decreto presidencial del 13 de febrero pasado referente al maíz señala que el consumo directo de este insumo en la tortilla y otros alimentos de los mexicanos debe ser con maíces que no son transgénicos; los 18 o 19 millones de toneladas de grano amarillo transgénico que importa México, por año, van al sector pecuario, por lo que no hay afectación al comercio de los productores de Estados Unidos.
Así lo expresa a imagenagropecuaria.com, el secretario ejecutivo de la Comisión Intersecretarial de Bioseguridad de Organismos Genéticamente Modificados (Cibiogem), Alejandro Espinosa Calderón, quien añade que el maíz que vende esa nación a la industria de nuestro país lo seguirá haciendo, en tanto nosotros no logremos la autosuficiencia y soberanía alimentaria.
Durante la conversación, anota que la presente administración del presidente Andrés Manuel López Obrador ha seguido al pie de la letra su compromiso que asumió de decir: “no a los transgénicos, no al glifosato, ni nada que atente contra la salud y la esencia de los mexicanos”.
Los argumentos externos que aducen que estamos afectando o podría verse afectado el comercio de maíz de Estados Unidos hacia México, “no es de esa manera” y “no hay razonamientos que valgan, nada esta por encima de nuestros valores”.
El presidente López Obrador lo ha dicho de manera clara: ”nosotros tenemos el derecho de alimentarnos de la manera como lo decidamos”, subraya el doctor quien ha participado en los movimientos históricos de oposición a los transgénicos.
El experto, quien también ha sido investigador de Instituto Nacional de Investigaciones Forestales, Agrícolas y Pecuarias (INIFAP) y desarrollado híbridos y variedades mejoradas de maíces para Valles Altos y otras regiones del país, comenta que en México se producen 24 millones de grano de maíz blanco y 3 millones de maíz amarillo. Se necesitan 14 millones para elaborar tortillas por año; cada día se consumen 3 millones de tortillas, un promedio de 3 o 2.7 tortillas por mexicano.
Nuestra producción de grano blanco es suficiente para alimentar a los mexicanos sin recurrir a los transgénicos”.
Dentro de sus reflexiones dice estar convencido de que en México “podemos producir esos 19 millones de toneladas de maíz amarillo que se importan. Eso no es de un día para otro, el presidente de la República tiene la claridad de que logremos la soberanía alimentaria”.
Espinosa Calderón señala que la “gran cruzada” que tenemos que hacer desde ya y para la siguiente administración, es generar las variedades mejoradas amarillas que requiere el país. El INIFAP tendría si se apoya, como debe ser, un proyecto que plantea contar y usar extensivamente más de 40 nuevas variadas que están listas para su uso comercial, así como aprovechar las excelentes variedades nativas, para lograr la autosuficiencia y soberanía alimentaria. “Es una asignatura que deberá asumir el siguiente secretario de Agricultura. Que es indispensable sea, nacionalista”.
Hay una propuesta del doctor Antonio Turrent, denominada Granos del sur, que habla de aprovechar en el sur-sureste entre uno y dos millones de hectáreas en ciclo otoño invierno y aportar al menos 12 millones de toneladas de maíces amarillos, con variedades que tienen las instituciones nacionales, donde además se requiere la participación de Semilleros Unidos Mexicanos (SEMUAC), que trabaja con empresas pequeñas y medianas para ofrecer semillas a productores nacionales. Trabajar con ellos sería una alternativa para aumentar producción y lograr la suficiencia en maíces amarillos.
El detalle –abunda– esta en la disponibilidad de abastecimiento de semillas, que esta distorsionado y en desequilibrio, porque así lo promovieron gobiernos neoliberales anteriores al favorecer los oligopolios y la concentración en la venta de semillas de grandes firmas. Así como desviar apoyos, despreciando instituciones nacionales.
Gobiernos de 4T mantendrán el no a los transgénicos
El secretario ejecutivo de Cibiogem está convencido de que en el próximo gobierno de la Cuarta Transformación se va a mantener el no a los transgénicos, porque todos los que luchamos para detener la siembra de soya y maíz transgénicos lo hicimos cuando el país era administrado por los neoliberales, cuando la secretaria ejecutiva de Cibiogem y secretarios de Estado estaban a favor de liberar los organismos genéticamente modificados; y si lo logramos bajo esas condiciones, con mucha más razón estamos convencidos que esto seguirá en las siguientes administraciones. “Con la claridad, que tiene el gobierno actual, la 4T, por el bien del campo, productores, salud de consumidores, sustentabilidad, por bien del futuro luminoso de México”.
En la charla, Alejandro Espinosa también hace referencia a que el Consejo Nacional Agropecuario aseguraba que por limitar el uso de glifosato ocurriría una catástrofe en el campo mexicano, que disminuiría la producción del 30% al 40%; no hay tal y se estima que este año en lugar de 27.5 millones de toneladas, la producción será de 28.2 millones.
“Es una demostración de que se puede producir sin glifosato, sin transgénicos, con la atención al llamado del Presidente de fortalecer producción familiar, la siembra con variedades locales, y el autoconsumo con nuestros maíces nativos, su valiosa diversidad genética. Esto seguramente se fortalecerá aún más en la administración que se viene”.
Considera que igual será fundamental que el siguiente gobierno modifique donde se requiera la legislación en materia de bioseguridad. Por ejemplo, hay que revisar todo lo que se refiere al proceso de otorgamiento de autorizaciones: dar valor real al régimen especial de protección al maíz frente a nuevas tecnologías y tener más argumentos para proteger como corresponde a los centros de origen de maíz, frijol, calabaza, chile, amaranto, y resguardar los cultivos cuyo centro de origen es Mexico.
El país no puede, como se pretendió en gobiernos anteriores, dividirse y autorizar transgénicos en el norte y limitarlos en el sur sureste.
México es centro de origen en toda su geografía y el maíz es tan importante que merece que preservemos su biodiversidad, porque representa un valor inconmensurable para la humanidad”.
Por último, Calderón Espinosa refiere que con la postura que mantienen los estadounidenses que cuestionan el decreto presidencial, “parece que pretendieran que incluso lo que consumimos de tortilla se declarara que pudiera ser con transgénicos; mientras tengamos un Presidente con los tamaños históricos y con la estatura patriota del actual, eso nunca va a ocurrir. Él esta muy firme en lo que debe hacerse para defender esto. Por supuesto somos millones quienes estamos junto a él. Por supuesto mi espada, pensamiento, palabra y obra en prenda”, manifiesta.