Nopal, alimento ancestral que persiste
El proceso de domesticación del nopal comenzó hace aproximadamente 8 mil años y fue el alimento principal de los grupos chichimecas.
Hoy en día existen mil 400 especies de la Familia Cactaceae, 670 viven en México, y de éstas, 518 son endémicas. El territorio mexicano se considera el centro de mayor diversidad de cactus del continente, así como el centro de diversidad de los nopales.
Los nopales se dividen en dos grupos (según algunos especialistas): Opuntia y Nopalea. Aunque los tallos de ambos grupos son muy similares, la forma de las flores es distinta. Las del género Opuntia parecen copas con pétalos pequeños y son polinizadas por insectos, las de Nopalea son elongadas, con pistilo, estabres largos y sobresalientes, son polinizadas por los colibríes.
De acuerdo con la Comisión Nacional para el Conocimiento y Uso de la Biodiversidad (Conabio) los nopales se encuentran desde el norte hasta el centro del país y alcanzan su mayor complejidad y riqueza en el Altiplano central. Cada nopalera constituye, en una escala regional, un universo de especies vegetales y animales que sólo se hallan bajo esas condiciones particulares.
Nopal, símbolo de nuestra identidad
En nuestro país se cultivan alrededor de 872 mil 334 toneladas de nopales y la superficie cosechada fue de 12 mil 365.35 hectáreas. Los principales estados productores son:
Morelos con 406 mil 608 toneladas; Ciudad de México con 198 mil 363 toneladas; Estado de México con 87 mil 767 toneladas; Jalisco con 35 mil 610 toneladas y Puebla con 32 mil 289 toneladas
Consejos para su cultivo
Selección del terreno.– El nopal se desarrolla en una gran diversidad de suelos, pero se sugiere que se plante en aquellos que tengan buena fertilidad, capa arable de al menos 30 centímetros, buen drenaje que evite los encharcamientos y cerca de alguna fuente de agua para riego, de esta manera, se aseguran altos rendimientos.
Preparación del terreno.- La preparación consiste en un barbecho, uno o dos pasos de rastra y nivelación con 0.05% de pendiente para facilitar los riegos.
Época de plantación.- A cielo abierto las plantaciones realizadas en marzo permiten el aprovechamiento de las condiciones climáticas naturales para obtener altas producciones.
La plantación se hace en terreno seco para que la penca madre se adapte y se eviten pudriciones iniciales; la brotación empieza rápidamente y a los 40 días después de la plantación se puede iniciar la cosecha en las pencas del primer nivel, pero se sugiere que la cosecha se haga a partir del segundo nivel, esto favorece el enraizamiento y fijación de la planta.
Riegos.- Si el terreno está seco, se inician los riegos a los 15 a 25 días después de la plantación y, cuando falten las lluvias, durante el ciclo primavera-verano se hacen riegos cada 20 días y durante el ciclo otoño–invierno se riega cada 30 días.
Plagas frecuentes del nopal
Cochinilla. La reproducción de la cochinilla (Dactylopius coccus) es rápida debido a que la hembra a los 36 días de edad, después de la fecundación comienza el desove poniendo aproximadamente 160 huevecillos.
Los daños en las pencas y frutos se localizan en la base de las espinas, formando una escama algodonosa. En los frutos demerita la calidad y puede inducir una caída prematura de éstos.
Picudo barrenador
El Picudo barrenador (Cactophagus spinolae) se alimenta del borde de las pencas tiernas y las hembras depositan sus huevecillos en las partes bajas de la planta y en las pencas en los sitios bien protegidos.
El daño por esta plaga se detecta por la acumulación de secreciones gomosas, que toman inicialmente un color amarillento y después se tornan negras. Esta plaga provoca disminución en la producción y, en casos extremos, la muerte de la planta.
Sabías que…
De las aproximadamente 200 especies de nopales que existen, 101 viven en México. De las 93 del grupo Opuntia, 62 son endémicas del país, y de las 8 especies de Nopalea, seis son endémicas.
Fuente: Sader