En peligro ecosistemas por deshielo de glaciares

Los glaciares fueron alguna vez un símbolo de la acumulación de nieves perpetuas, pero hoy desaparecen a un ritmo sin precedentes impactando profundamente al medioambiente y a las comunidades.
Como recursos hídricos de las altas montañas, son cruciales para las sociedades y los ecosistemas al surtir a los ríos que, a su vez, alimentan tanto a los reinos vegetal y animal como a las poblaciones humanas.
Los glaciares funcionan como un indicador de las condiciones climáticas globales y locales. Son importantes porque al ser un volumen de hielo, también son una fuente de agua. Además, tienen una importancia desde el punto de vista de riesgos porque cuando se comienzan a derretir, pueden juntarse con diversas fuentes de rocas o lodos, y esto pueden desencadenar aluviones que impactan a las poblaciones y la infraestructura.
Aunque generalmente asociamos la idea de los glaciares con climas fríos, también los hay en las zonas de alta montaña localizadas en la franja terrestre entre los trópicos de Cáncer y Capricornio. La cordillera andina concentra más del 95% de los llamados glaciales tropicales, más del 70% de ellos en Perú.
La Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO) y la Organización Meteorológica Mundial (OMM) han subrayado repetidamente la importancia de los glaciares para regular el clima mundial y suministrar agua dulce, esencial para miles de millones de personas.
Su deshielo, causado por el cambio climático tiene una injerencia directa en el equilibrio de los ecosistemas y de la economía de las sociedades, exponiéndolas a riesgos de desastres y carencias que a menudo pueden forzar migraciones masivas de población.
Además de aumentar el nivel del mar, el derretimiento de los glaciares puede provocar aluviones y deslaves capaces de destruir pueblos enteros y, por otro lado dar lugar a sequías devastadoras.
En el caso de Perú, la relación de las comunidades cercanas a los glaciares tropicales es milenaria. Las comunidades ancestrales originarias los veneraban como deidades por ser una fuente de agua y de vida. Actualmente, los pueblos y comunidades de la región mantienen los valores de la cultura indígena y siguen considerando a los glaciares como entidades sagradas, espíritus a los que respetan y protegen.
Con el objetivo de concienciar sobre su papel crucial y garantizar que quienes dependen de ellos y se ven afectados por los procesos de deshielo reciban los servicios hidrológicos, meteorológicos y climáticos necesarios, la ONU declaró el 2025 como el Año Internacional de la Conservación de los Glaciares el 21 de marzo de cada año como Día Mundial de los Glaciares.
Fuente: ONU