Agronegocios

Mercado de vino mexicano, oportunidad de crecimiento

Baja California.— El mercado mexicano del vino está creciendo, ya que se consumen unos tres millones de cajas al año, aunque los vinos chilenos o españoles representan una competencia para los productores nacionales, expresa Fernando Martain Amozurrutia, presidente del Sistema Producto Vid.

Una de las dificultades es que la producción de uva es limitada, por lo que el dirigente advierte: “si no plantamos más viñedos quienes se van a quedar con el mercado van a ser los extranjeros”. De hecho, según otros organismos, 60 por ciento del vino que se consume en México procede de otras naciones, principalmente europeas y sudamericanas.

Un aspecto que hay que considerar —reflexiona Fernando Martain— es que el precio en México desgraciadamente es alto si se compara con vinos chilenos o españoles, lo que se debe a varios factores, entre ellos los naturales: en Europa la lluvia es abundante y en los Andes hay más agua, con la que se riega las viñas de Chile y Argentina. Por esta simple razón, los rendimientos en esos lugares son de 30 a 40 toneladas de uva por hectárea, mientras que en Baja California se obtienen de cinco a diez  toneladas en la misma superficie.

“Tenemos más calidad pero menor cantidad, lo cual hace que el precio se eleve”, dice con seguridad Martain Amozurrutia.

No obstante, señala que hay mercado para todo el vino que se produce en Baja California, hay empresas grandes como Cetto, Santo Tomás o Domecq, que sí compiten con los chilenos y los españoles; mientras que los pequeños productores nos estamos dirigiendo al mercado del restaurante, directo al mercado de las personas que saben de vino.

Baja California, líder en producción

Baja California es el principal productor de vino en México, al concentrar 90 de la producción nacional, ahí se pueden encontrar desde vinos elaborados en forma artesanal, que les brinda características únicas y especiales, como aquellos altamente industrializados que compiten en el ámbito comercial con los que se producen en países sudamericanos o europeos.

En Baja California existen de tres mil a tres mil 500 hectáreas de uva, de donde sale la materia prima para producir un millón de cajas de vino al año, de las cuales 90 por ciento se destinan al mercado nacional y 10 por ciento a la exportación.

La actividad vinícola ha crecido en los últimos años. Una década antes éramos diez vinícolas, hace tres años crecimos a 20 y ahora somos más de 40, comenta Martain. Una de las políticas que fomenta el gobierno de la entidad —agrega—, por medio de talleres, es que los 200 productores que tienen viñedo se conviertan en productores de vino.

El presidente del Sistema Producto Vid señala que se está reactivando la vinicultura, ya que el vino siempre había sido considerado como una bebida alcohólica dañina al organismo, pero desde hace diez años se han hecho estudios que concluyen que en dosis moderadas es bueno para la salud, baja el colesterol, ayuda con el estrés y gracias a esto hay una nueva corriente que beneficia su consumo y a los productores porque está creciendo la demanda.

El vino de Baja California está bien posicionado en el ámbito internacional, ha ganado muchas medallas de calidad en Europa, Estados Unidos y Sudamérica, por lo que su nivel de calidad es comparable a cualquier otro del mundo, afirma Martain Amozurrutia.

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