Orquídeas, belleza que vale
El gerente administrativo de la empresa Orquídeas Río Verde, expone que el conjunto de productores nacionales aún no cubren el total de la demanda por lo que se espera que los precios sigan rindiendo altos márgenes de ganancia.
La afición por la especie está creciendo, afirma, ya que antes era un mercado muy selecto, porque había pocos productores y precios sumamente altos; empero, con el incremento de producción y de mejores cadenas logísticas para llegar al cliente, se ha reducido un poco el precio de la orquídea y se ha generado mayor interés por parte del público en general.
Tras apuntar que este rubro es una oportunidad de diversificación para floricultores mexicanos, acotó que, sin embargo, hay limitaciones como la escasa disponibilidad del material vegetativo; se importa de Holanda, que lamentablemente tiene poca variedad y para el resto de especies comerciales importadas sigue siendo muy complicado por los permisos, por ejemplo, se requiere registrarse como UMA.
En entrevista con Imagen Agropecuaria, puntualiza que de la producción comercial de orquídeas, el grueso se va en una variedad del sureste asiática (Phalaenopsis) que por su longevidad y crecimiento de la planta se ha convertido en el estandarte de las orquídeas. En este caso, 90 por ciento de la plántula es importada y 10 por ciento se produce en México.
Cusi asegura que lo importante es promover las variedades nacionales, que son muy interesantes y que estamos desaprovechando. En especies mexicanas hay muchas del género Oncidium, Cattleyas y Laelias, que son atractivas y muy solicitadas para el público en general.
El experto considera que es posible tener material vegetativo en México, lamentablemente los ciclos son largos, desde que se pone la semilla a la primera floración pasan dos años y medio, en el mejor de los casos, y preparar un programa de alta producción para una nueva especie dura de tres a cuatro años.
Negocio para hacer las cosas bien
El negocio –dice Cusi– es para gente con afán de ir adelante, probar que las cosas se pueden hacer bien en México, y sí tienes que estar organizado y capacitado. El proceso de propagación in vitro requiere de conocimientos técnicos específicos.
El mercado es positivo, agrega, existe mucho potencial. La gran ventaja de las orquídeas es que hay una variedad enorme, entonces cuando piensas que una ya se está choteando o agotando, hay otra prácticamente virgen y lista para explotarse.
En orquídeas somos el único laboratorio privado que produce de manera comercial, hay otros laboratorios en el área de investigación como en la Universidad Autónoma de Chapingo y otras instituciones, además de aficionados.
Orquídeas Río Verde tiene capacidad para producir 60 mil plantas anuales, y en plántula de medio millón al año. Producen en superficie cubierta de 4 mil metros cuadrados y 200 metros cuadrados de laboratorio. Sus clientes son medios mayoristas que se dedican a distribuir a eventos, arreglos de restaurantes, aficionados; sus flores llegan a Monterrey, Guadalajara o lugares turísticos como Cancún, Puerto Vallarta o Ixtapa.
Por ahora se concentra en vender planta terminada, porque flor de corte requiere de grandes áreas cubiertas y alta tecnología. También exportan híbridos (en plántula o frasco) que han desarrollado o especies mexicanas propagadas, pero apenas representa 10 por ciento de sus ventas.
Sandro Cusi anota que hoy no existe ningún estudio que mencione hasta dónde llegará el mercado de las orquídeas, “pero cada año a pesar de que incrementamos significativamente nuestra producción, se agota”.
Río Verde nace en 1993 como una microempresa dedicada al cultivo, propagación y venta de orquídeas, principalmente especies mexicanas.
La entrevista se realizó en el marco de la XIII Reunión Regional Centro de Intercambio de Experiencias Exitosas en Desarrollo Rural Sustentable (RENDRUS)”, organizada por la Sagarpa, en colaboración con la Secretaría de Desarrollo Rural y Equidad para las Comunidades (SEDEREC) del gobierno del Distrito Federal.
