Durante un recorrido por el Centro Internacional de Mejoramiento de Maíz y Trigo (CIMMYT), el coordinador de Asuntos Internacionales de la Sagarpa, puntualizó que en el caso de maíz, con un régimen especial, en el reglamento se especifica cómo se llevarán a cabo los ensayos y cuáles son las medidas de bioseguridad que se implementarán para poder ir ganando experiencia en la materia.
Los maíces criollos o razas, aseguró, no están en riego porque una de las medidas de seguridad es evitar que se produzca polen, por lo que se desespigará el maíz para los experimentos y cuando se requiere hacer algún ensayo de rendimiento entonces se polinizan las plantas madres con polen no transgénico.
Al ser cuestionado sobre la publicación del reglamento de la LBOGM, Villalobos expresó: “entendemos ya esta listo, se paso a la Consejería Jurídica de Presidencia; entonces nada más estamos esperando que se haga su publicación”.
En entrevista apuntó que cada articulado del reglamento permite implementar plenamente la ley en la materia y destacó que uno de los aspectos más importante es que define en un esquema sustentado en datos científicos cómo llevar a cabo los ensayos de maíz u otra especie con el mínimo riesgo posible.
Los tres estados considerados inicialmente para la experimentación con maíz transgénico son Sinaloa, Tamaulipas y Sonora, porque estamos completamente de que ahí no hay razas de maíz criollas”, expuso Villalobos.
