Mejorará riego con planta de tratamiento de Atotonilco
Como pago a una deuda histórica que tiene el valle de México con el estado de Hidalgo, se construirá la macro planta tratadora de aguas negras de Atotonilco, que será una de las más grandes del mundo y tendrá la capacidad de tratar 23 metros cúbicos, es decir, 23 mil litros de agua por segundo.
La planta cuenta con un módulo adicional que permite procesar 12 metros cúbicos más en temporada de lluvias. Estos 12 mil litros serán procesados a través de un mecanismo físico-químico.
La mega obra, que ya se construye, beneficiará a cerca de 700 mil habitantes del Valle del Mezquital, que durante cientos de años padecieron un ambiente lleno de insalubridad, causado por las aguas negras provenientes del Valle de México, tanto del Distrito Federal, como de los municipios conurbados del Estado de México.
Esta planta de Atotonilco pretende mejorar las condiciones sanitarias de riego e incrementar la producción agrícola en cerca de 95 mil hectáreas. El agua que se obtenga para riego será de muy buena calidad y permitirá a los productores cosechar cultivos rentables como hortalizas o frutales.
Para la construcción de la planta tratadora de aguas residuales la Conagua cuenta con un predio de 158 hectáreas, en una zona cercana al portal de salida del Túnel Emisor Central, lugar por donde desembocan las aguas negras al municipio hidalguense de Atotonilco.
El director general de Conagua, Losé Luís Luege Tamargo explica que la planta sólo traerá beneficios a la comunidad y no como dicen algunas personas, que esta obra podría desertificar los suelos, ya que no contará con los materiales orgánicos que acarrean las aguas negras.
Por su parte, el Ingeniero José Ramón Ardavín, subdirector general de agua potable, drenaje y saneamiento comenta que se planea reducir los niveles de acidez de esas tierras para hacerlas más productivas.
Ardavín Ituarte comenta que cuando llueva, que es más o menos un 20 por ciento del año, se pondrá en operación el tren de procesos químicos y cuando, funcionará el tren de procesos biológicos, convencionales. Además cuenta con un esquema de recuperación de biogás, que la hace aún más eficiente, pues este gas se transformará en energía eléctrica para el funcionamiento de la propia planta.
La planta de tratamiento de aguas residuales de Atotonilco es un proyecto de más de 10 mil millones de pesos, cuyos recursos provienen en un 45 por ciento del sector público y el resto de capital privado aportado por un consorcio de empresas que ganaron el concurso de la licitación. Asimismo, se incorpora un porcentaje de capital de riesgo.
Se estima que la obra concluya en 2012. El contrato de concesión contempla un periodo de 25 años, dos de construcción y 23 más de operación de la planta.
Luege Tamargo destaca que la marco planta de Atotonilco tendrá la capacidad de tratar el 40 por ciento de todas las guas negras que se generan en el Valle de México y en la zona metropolitana. El otro 60 por ciento se trabajará con plantas ya existentes.
Asimismo, estima que para 2012 se tengan construidas las macro plantas de el Ahogado y Aguaprieta, que permitirán, junto con las demás presas, alcanzar el 60 por ciento de las aguas negras recaudadas del país.
De igual forma, comenta que “el programa de saneamiento a nivel nacional va trabajando bien, se tiene una meta de tratar el 70 por ciento de las aguas residuales colectadas municipales, ello incluye alcanzar el cien por ciento en ciudades de más de 20 mil habitantes para 2012.”
Una planta de tratamiento de esta naturaleza procesa las aguas residuales en varios procesos. El primer paso es separar la basura del agua, que por cierto es una mezcla de agua residual con agua de lluvia; posteriormente, se pasa a un proceso de transformación de contaminantes, principalmente gases de efecto invernadero, que fomentan el calentamiento global.
Un tercer paso es la eliminación de lodos, de donde se puede obtener combustibles como el metano, que a su vez sirven de material energético para el mismo funcionamiento de la planta. De ahí el agua corre hacia estanques de desinfección, y finalmente se va a presas y campos de cultivo de riego.
En cuanto a hacer más eficientes los cultivos de riego mediante el empleo de agua tratada proveniente de la planta de tratamiento de Atotonilco, el gobierno del estado de Hidalgo contempla implementar un programa de tecnificación de sistemas de riego. Ello representa una oportunidad de crecimiento económico para los productores locales, puesto que podrán cultivar una mayor variedad de productos.
