Por ello, la organización hizo un llamado para frenar el “desastre alimentario que vive el país,” el más severo de los últimos 80 años. A través de una serie de medidas como la declaratoria de emergencia agroalimentaria nacional por parte del ejecutivo federal y un programa de entrega inmediata de apoyos para los productores que resultaron afectados por las heladas, para que comiencen con un proceso de resiembra intensivo para el ciclo primavera-verano.
Exigen el pago y adelanto de apoyos del Procampo para todos los productores afectados, no sólo para los de Sinaloa, a quienes -refiere la Conoc- atienden por presiones políticas y económicas. Explican que las afectaciones también fueron en Sonora, Coahuila, Chihuahua, Tamaulipas, Nuevo León y el norte de Veracruz, y por lo tanto necesitan los mismos apoyos que los productores sinaloenses.
La misma Conoc dio a conocer que alrededor de 300 mil jornaleros se quedarán sin trabajo, pues las regiones a donde se trasladan en temporada de cosecha fueron azotadas por las heladas. También urgieron al gobierno federal para establecer un programa de empleo temporal para estas personas, que en su mayoría son originarios de comunidades indígenas y marginales.
Víctor Suárez, director ejecutivo de la Asociación Nacional de Empresas Comercializadoras de Productores del Campo (ANEC) destacó que México no cuenta con un sistema público de reservas de alimentos que permita enfrentar situaciones de riesgo alimentario, como la que se vive hoy, derivada de las afectaciones climatológicas.
Puntualizó que “no ternemos reservas ni para una semana”, en cambio China tiene garantizado el abasto hasta por tres años y Japón tiene suficiente arroz para los próximos dos años.
Fernando Celis, de la Coordinadora Nacional de Organizaciones Cafetaleras (CNOC), refirió que las autoridades ya tenían conocimiento del impacto que podrían tener las heladas y no hicieron nada para prevenirlo. Asimismo, la entrega de apoyos no tiene cimientos precisos y diferenciados de cada rama productiva. “Sólo son bomberazos económicos,” agrega.
Otra medida que plantea la Conoc es el alineamiento y simplificación del ejercicio de los programas de fomento productivo de las secretarías de estado como Sagarpa, Sedesol, de la Reforma Agraria, de Economía y Hacienda; con el objetivo de hacer más eficientes dichos recursos y incrementar la productividad agrícola de manera sostenida, principalmente la agricultura familiar de temporal en pequeña y mediana escala.
Isabel Cruz Hernández, directora de la Asociación Mexicana de Uniones de Crédito del Sector Social (AMUCSS) destacó que en los últimos 15 años la base productiva de México se ha erosionado. Se tiene que reactivar la producción interna y ello se logrará gracias a la agricultura familiar, siempre y cuando se den las reformas necesarias en materia de apoyos y créditos, concluye.
