Proponen tasa fija de interés en créditos para producción de alimentos
La actividad es fundamental para combatir el hambre y garantizar la soberanía alimentaria…
El campo requiere de una reforma profunda a la banca de desarrollo, la inclusión de la banca social y el fortalecimiento de intermediarios financieros, que permita a todos productores, sobre todo a los más pobres, acceder al crédito y establecer tasas fijas y accesibles para la producción de alimentos, dado que esta actividad es fundamental para combatir el hambre y garantizar la soberanía alimentaria del país.
Hoy los productores más grandes del norte del país obtienen tasas de interés de 8 o 9 por ciento, menores a las de pequeños agricultores del sureste, quienes por ser considerados de mayor riesgo por parte del sistema financiero, pagan desde 16 hasta 48 por ciento.
Lo anterior lo expuso la directora ejecutiva de la Asociación Mexicana de Uniones de Crédito del Sector Social (AMUCSS), Isabel Cruz Hernández, quien señala que con tasas tan inequitativas “no se puede desarrollar la producción agropecuaria”, por lo que en los créditos debe haber un control de tasas de interés para que los alimentos se produzcan con la misma tasa “en todos los rincones del país”.
En Brasil existe un esquema similar con el Programa Nacional de Alimentos, donde la tasa de interés es de entre 3 y 6 por ciento, y es controlada y determinada con base en base una política nacional; el gobierno subsidia el diferencial de la tasa a intermediarios, bancos, cooperativas bancos de desarrollo, microfinancieras, quienes pueden canalizar créditos, pero no pueden mover la tasa.
En el caso de México, Isabel Cruz consideró que tomando en cuentas las condiciones del país, las tasas deberían ubicarse en 8 por ciento para la producción de alimentos, pero ahora la gran mayoría de productores rurales paga alrededor del 20 por ciento y en algunos casos más.
Refirió que FIRA canaliza 120 mil millones de pesos (mdp)y Financiera Rural, 30 mil mdp, y para llegar a productores pobres se necesitarían tres veces más de lo que hoy se destina en crédito al sector rural.
Reforma financiera limitada
En rueda de prensa, donde se anunció la Cumbre Mundial de Finanzas Solidarias: Promoviendo más justicia económica e incluyente, que se efectuará en Oaxaca los días 29 y 30 de mayo, la directora ejecutiva de la AMUCSS habló de las limitantes de la reforma financiera anunciada recientemente por el gobierno federal.
Subrayó que dicha reforma privilegió al sector bancario y subvaloró a las bancas social y a la de desarrollo. Ésta última se abordó en forma “muy ligera”, con principios generales y “no toca a instituciones como FIRA, que es el banco más importante proveedor de recursos para el sector rural.
La reforma contempla la creación de corresponsales para las instituciones de ahorro, crédito y préstamo popular, sin embargo hay una subvaloración de lo que es la banca social y las instituciones de ahorro y crédito popular, con capacidad de llegar hasta los lugares más recónditos de México y atender a personas de extrema pobreza, pero hoy día no tienen suficiente fuerza institucional.
Por ello, consideró Isabel Cruz, se requiere un plan nacional de fortalecimiento de la banca social porque la banca comercial no va a llegar nunca a los lugares donde están los más pobres, aun cuando en la reforma financiera existe la idea de crear incentivos legales para que los bancos privados presten y se apuesta mucho a la reactivación del crédito por parte de éstos.
Mencionó que los bancos ya ganan bastante con los créditos al consumo y las comisiones que cobran, y es difícil pensar que van a destinar mayores recursos para actividades productivas, y menos en el sector agrícola, donde los productores no tienen garantías que ofrecer.
La reforma financiera es limitada, dado que deja fuera a la banca social y pequeños intermediarios financieros que atienden zonas pobres, “nos sorprendió porque la prioridad del actual gobierno es del combate al hambre y esto no se puede hacer sin servicios financieros, porque esta probado que los esquemas de transferencia directas de subsidios como Oportunidades o 60 y más, ayudan a la gente a sobrevivir pero no los sacan de la pobreza”.
En dicha reforma falta un enfoque productivo para reforzar pequeña empresa rural o familiar, incentivar la vía económica, el desarrollo productivo, fomentar que aumente la producción de alimentos en zonas pobres para que la gente no tenga que migrar. “No hay un vínculo entre la reforma financiera y las acciones de tipo productivo para tener resultados efectivos en el combate a la pobreza”.
Antonio Ortega, gerente general de Fed Rural, indicó que sólo 6 por ciento de los agricultores mexicanos tienen acceso al crédito productivo, y estos son los grandes productores con probada capacidad de pago, mientras que los propietarios de terrenos de menos de 3 hectáreas, e incluso hasta de 10 has, no tienen oportunidad de obtener apoyo financiero.
También expuso que en México apenas 18 por ciento de la población económicamente activa recibe crédito financiero y de acuerdo con reportes de la Comisión Nacional Bancaria y de Valores, por cada 10 mil habitantes hay menos de una sucursal bancaria.
En este sentido agregó que el hecho de que 82 por ciento no este bancarizado habla de un potencial de detonar y reactivar servicios financieros para incluirlos a través de intermediarios financieros formales.
Sobre la Cumbre Mundial de Finanzas Solidarias: Promoviendo más justicia económica e incluyente, se destacó que se espera la participación de unas 60 instituciones internacionales relacionadas con las finanzas solidarias y alrededor de 100 nacionales, así como funcionarios públicos, especialistas y académicos relacionados con el sector, quienes reflexionarán e intercambiaran experiencias en la materia.
