Todo lo que comemos se produce en una forma que implica algún tipo de transformación del medio ambiente, lo que significa que debemos debatir de forma exhaustiva el tipo y magnitud de las transformaciones que estamos dispuestos a aceptar, afirmó el director general de la FAO, QU Dongyu, en su discurso inicial ante los participantes de una reunión de alto nivel sobre la biodiversidad.
La agricultura y los sistemas alimentarios están “en el centro del concepto de desarrollo sostenible” y son fundamentales en las deliberaciones sobre el Marco para la Biodiversidad post-2020, añadió.
QU Dongyu intervino al comienzo de la segunda reunión del Grupo de Trabajo de composición abierta establecido por el Convenio sobre la Diversidad Biológica (CDB), del que la FAO es anfitrión.
“Sé que el mundo espera con impaciencia que se hagan progresos tangibles hacia un marco mundial claro, viable y transformador en materia de diversidad biológica”, aseguró por su parte Elizabeth Maruma Mrema, Secretaria Ejecutiva interina del CDB.
Qu expresó su esperanza de que los participantes lleguen a un resultado “contundente” que se acordaría en la Conferencia de las Naciones Unidas sobre la Diversidad Biológica prevista en Kunming (China) en octubre de 2020. El marco decidido allí fijará el rumbo para los próximos 10 años y el futuro.
“La biodiversidad es fundamental para los ecosistemas, para los seres humanos, y es la base de la diversidad alimentaria”, dijo Qu, subrayando el enorme desafío que supone alimentar a más de 9 000 millones de personas en 2050 de forma que se asegure una dieta saludable y se evite la sobreexplotación de los recursos naturales.
El director general señaló que la FAO ha logrado “muchos hitos” en la historia de los esfuerzos de las Naciones Unidas para lograr la conservación de la biodiversidad, destacando el Código de Conducta para la Pesca Responsable y el Tratado Internacional sobre los Recursos Fitogenéticos para la Alimentación y la Agricultura, así como productos del conocimiento como el informe del año pasado El estado de la biodiversidad para la alimentación y la agricultura en el mundo.
Los servicios funcionales clave que la FAO presta a los Estados Miembros, como la recolección y difusión de datos, el establecimiento de normas, el debate sobre políticas y la creación de capacidad, serán útiles en la búsqueda de la protección de la diversidad biológica.
