Mujer aporta a seguridad alimentaria, pero no tiene acceso a crédito
En México, 938 mil mujeres trabajan en el sector primario, pero sólo 21% de ellas son propietarias de sus tierras, lo cual dificulta su acceso al financiamiento por los requisitos que imponen instituciones y entidades bancarias.
De las mujeres trabajadoras en el campo, 83.9 por ciento participa en la agricultura; 13.3 por ciento en la ganadería; 1.1 por ciento en la pesca y 1.7 por ciento en otras actividades relacionadas, indicó la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural, con motivo del Día Internacional de las Mujeres Rurales, que se celebró el 15 de octubre pasado.
En México hay una población de 68.8 millones de mujeres, de las cuales el 21 por ciento vive en localidades rurales, de acuerdo con información del Servicio de Información Agroalimentaria y Pesquera (SIAP).
Las mujeres con su trabajo diario labran la tierra y plantan las semillas, cuidan a los rebaños, ordeñan a las vacas, entre otras actividades, y con sus manos garantizan la seguridad alimentaria de sus comunidades y del mundo”.
Cooperación para visibilizar aportación de mujeres rurales
La cooperación entre el gobierno, sector privado y sociedad civil es imprescindible para para implementar políticas y estrategias encaminadas a visibilizar el trabajo y aportación de las mujeres rurales y así romper con la brecha de género, pobreza y acceso a oportunidades que aún prevalecen, expresaron las participantes en el foro Resignificando el papel de las mujeres en el campo mexicano.
En este encuentro se destacó que datos de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) indican que, en América Latina, las mujeres rurales representan el 29% de la fuerza laboral, y son responsables de más del 50% de la producción de alimentos. La gran mayoría son jefas de hogar y el sustento de sus familias, pero a pesar de ser una pieza fundamental en el sistema alimentario, aún enfrentan diversos obstáculos para ejercer sus derechos.
El Instituto Nacional de las Mujeres señala que 56% de las mujeres rurales de nuestro país se encuentra en situación de pobreza; sufren 2 de cada 3 muertes maternas y tienen en promedio 2.4 años menos de escolarización que las mujeres que viven en núcleos urbanos. Tienen, además, menor acceso a la tierra y a programas de financiamiento y capacitación para su desarrollo como agricultoras.
“Las brechas estructurales aún son muchas y bastante profundas, y cuando hablamos de esta intersección entre ser mujer y vivir en un entorno rural ya es una desventaja. Las mujeres rurales están inmersas en un contexto de empleo precario, de una baja participación económica, y en este entorno virtual, la apropiación tecnológica también es bastante baja”, señaló Carolina Maldonado Pacheco, directora de los Derechos Económicos de las Mujeres de Iinmujeres.
En tanto, Ancuta Caracuda, Especialista Senior en Desarrollo Territorial del Instituto Interamericano de Cooperación para la Agricultura (IICA), señaló los lineamientos o estrategias deberían estar reflejadas en estrategias y programas públicos: “estos deberían tener un enfoque de equidad e inclusión, que tengan como objetivo principal combatir las desigualdades entre hombres y mujeres, así como la democratización de las actividades del cuidado familiar.
La presidenta de la Comisión de Inclusión y Diversidad del Consejo Coordinador Empresarial, Laura Tamayo, apuntó que el abordaje se debe dar a partir de “políticas con perspectiva de género en dos ámbitos: el económico, que tiene que ver con la educación y la capacitación; y el punto de vista social, que involucra a redes de mujeres rurales y de colectivos que ayuden a desarrollar el talento del género femenino en el campo mexicano”.
La también directora de asuntos públicos, comunicación y sustentabilidad en Bayer México, dijo que desde el punto de vista empresarial, la inclusión y la diversidad, en cualquier ámbito, genera riqueza y valor. La inclusión no solamente es un tema de justicia, sino de tener la representatividad y de buenas prácticas de negocio.
Bonos sociales de género
En este marco, FIRA difundió información donde señaló que en México 79% de la tenencia agrícola está en manos de los hombres en contraste con el 21% de las mujeres que son propietarias.
Indicó que en su cartera las mujeres representan el 80% de los acreditados totales que anualmente se atienden a través de una amplia red de intermediarios financieros bancarios y no bancarios, por lo que en 2020, más de 640 mil mujeres recibieron por primera ocasión un servicio financiero de la institución.
Refirió que los recursos captados a través de las tres emisiones de bonos sociales de género que ha hecho en el mercado bursátil, han contribuido a incrementar la inclusión financiera para cerca de 10 mil mujeres en el medio rural de las cuales, el 42% recibió su primer crédito con recursos del bono de género, mientras que el 58% restante ya había sido acreditada por FIRA al menos una vez.
Cabe referir que con este motivo en la explanada de la sede de la Secretaría de Agricultura, donde se montó la exposición: “Día Internacional de la Mujer Rural”, de Juan Pablo Zamora Pérez.