Con la apertura de China a la importación de carne de res de los Estados Unidos, la administración Trump se adelantó al gobierno de México, que tendrá que seguir gestionando ante autoridades de la nación asiática para penetrar ese mercado.
El presidente del vecino país del norte, Donald Trump, logró concretar dicha apertura, tras la reciente visita del presidente de China, Xi Jinping, a territorio estadounidense, cuyos gobiernos desde el año 2004 habían estado buscando enviar carne de res al “gigante asiático”.
Cabe señalar que en estos años México también había buscado obtener la certificación que le permitiera exportar carne de res a China, incluso delegaciones de inspectores de esa nación asiática han visitado el país, con el propósito de avanzar en este proceso, mismo que no se había logrado concretar del todo.
Lo anterior, de acuerdo con información del Consejo Nacional Agropecuario (CNA), porque las autoridades de nuestro país (Senasica) han dado prioridad a la certificación de otros productos, como la carne de cerdo, bajo de la estrategia de ir negociando producto por producto.
El organismo subraya que en este proceso de certificación para exportar a China Estados Unidos “se adelantó, por lo que nuestro país tendrá que seguir haciendo esfuerzos para lograr esta certificación con el apoyo de Senasica y el sector productivo”.
El 12 de mayo pasado, el secretario de Agricultura de los Estados Unidos, Sonny Perdue, emitió un comunicado para informar que se firmó un acuerdo entre los gobiernos chino y estadounidense en diversos temas comerciales, entre ellos el referente a la apertura de las exportaciones de carne de res de los Estados Unidos a esa nación.
Consideró que “esta es una gran noticia para la industria bovina de América, la comunidad agropecuaria y en general para la economía de los Estados Unidos. Nosotros nuevamente vamos a tener acceso al enorme mercado potencial de China, con una clase media fuerte y creciente que había estado cerrada a nuestros productores por muchos años…”
El CNA apunta que “esta medida indirectamente es positiva para México, ya que en la medida que la Unión Americana, realice envíos a China, esto permitirá desfogar el mercado de América del Norte, lo que a su vez puede favorecer los precios de la carne de res en nuestro país”.
Refirió que el impedimento que existía para los Estados Unidos estaba vinculado a la exigencia de China de la no utilización de beta agonistas en la producción bovina. No se espera que se concentren las compras de esta nación asiática en gran medida en cortes finos, pero si en cortes más populares, tipo los que envía Estados Unidos a México.
