Inspeccionar y certificar: claves para proteger la integridad en agricultura orgánica
Del crecimiento del mercado orgánico en el mundo, de las dudas que existen entre autoridades de estadounidenses y europeos sobre la equivalencia en certificación orgánica con México, y del papel que juegan los inspectores y las certificadoras de procesos orgánicos hablaron Miles McEvoy M.S., ex administrador general del Programa Nacional Orgánico (NOP, por sus siglas en inglés) de los Estados Unidos (EU) y Dr. Jochen Neuendorff de la GfRS de Alemania.
Ambos visitaron México para impartir el Curso anual para inspectores en temas de procesamiento de alimentos orgánicos, invitados por CERTIMEX (Certificadora Mexicana de Productos y Procesos Ecológicos S.C.), cuyos objetivos principales fueron actualizar los conocimientos del personal de inspección y certificación en México conforme a los reglamentos de CERTIMEX equivalente a los reglamento de la Unión Europea (UE) para productos orgánicos, El National Organic Program (NOP) de los Estados Unidos, la regulación mexicana y normas JAS para productos orgánicos de Japón.
En el marco de este curso –que se realizó del 22 al 24 de octubre del presente año en la Ciudad de Toluca, Estado de México–, Miles McEvoy, quien trabaja en agricultura orgánica desde 1988, resaltó que el mercado orgánico está creciendo en todas partes y en EU casi 5 por ciento del mercado es orgánico, en el rubro de frutas y verduras es del 10 por ciento y en ensaladas alcanza a casi 50 por ciento. Por eso se invierte mucho en agricultura orgánica. “Es una gran oportunidad para los productores de México para vender al mercado interno que está creciendo y también para exportar a los EU y la UE”.
En Europa el mercado también está creciendo, anotó Jochen, al grado que requerimos importar de terceros países y no sólo productos tradicionales. En Alemania, por ejemplo, 7 por ciento del valor total de los alimentos corresponde al sector orgánico. La demanda del consumidor es cada vez mayor y cumplir con esto es una tarea de los inspectores y las certificadoras, al igual que evitar que se den fraudes en lo orgánico. En este contexto dimos este curso con CERTIMEX.
Equivalencia con EU y EU
Al referirse al tema de la equivalencia en certificación orgánica que busca México con EU, Miles McEvoy recordó que en la parte estadounidense había una evaluación del sistema de control de SENASICA, de las autoridades orgánicas de México, que está en una etapa final para tener un acuerdo entre ambas naciones. En EU, añadió, hay buenas perspectivas de las capacidades del SENASICA para implementar las reglas en México; pero todavía se necesitan unos cambios en las reglas para llegar a un acuerdo de equivalencia entre ambas naciones.
Sin embargo, Miles expuso que en EU también hay una perspectiva de temor de parte de los consumidores y el mercado sobre los productos orgánicos de México, de que hay mucha corrupción.
Por eso no se si hay la voluntad para entrar en este acuerdo entre ambas partes, además que la relación entre México y Estados Unidos en este momento es débil, no es tan fuerte”.
En el caso del Viejo Continente, Jochen Neuendorff manifestó que todavía no existe un acuerdo de equivalencia entre México y la UE, pero la comisión europea encargada del tema está en fase de evaluación a México, donde el punto primordial es cómo está la instrumentación de la regulación mexicana, no se limita tanto a los documentos sí más a la situación en campo, a las actividades de las autoridades y cómo se supervisa el mercado en México para garantizar que todos lo que se está vendiendo como producto orgánico se hace verdaderamente con certificación y en cumplimiento de la Ley de Productos Orgánicos.
En la UE tenemos un sistema de inspección y certificación muy bien apostado para combatir fraudes. La Unión Europea quiere ver que la autoridad competente en México actúa y hace las cosas para evitar esta problemática. Si pasa eso están en buenos pasos de ser reconocidos, sin problema”.
Recordó que en diciembre la comisión de la UE enviará un equipo técnico de expertos a México, quienes evaluarán cómo certificadoras y autoridades implementan el sistema orgánico mexicano.
Principios para inspector
En el marco del curso, Miles manifestó que un inspector necesita entender los sistemas de inspección orgánica, porque cada una es diferente según el tipo de cultivo y proceso, hay un sistema de plan de producción orgánica, donde se describe cómo usar fertilizantes que están permitidos, cómo se controlan las plagas, proteger la integridad de la cosecha, verificar qué ingredientes cumplan con las reglas y que no haya contaminación. Se requiere tomar las acciones necesarias para implementar el cumplimiento de esto.
En este sentido, Jochen Neuendorff, quien trabaja en el rubro orgánico desde 1989, añadió que un punto clave es la formación de inspectores, de cómo se conduce una inspección efectiva. Por eso, “es bueno que el sector se reúna para este tipo de entrenamiento y la idea es tener diferentes perspectivas, de los Estados Unidos, de Europa y de Japón, explicar a los inspectores que es una metodología, métodos nuevos, como asegurar la integridad orgánica, como manejar casos de residuos”.
Algunos grupos –aseveró– intentan exportar productos convencionales como orgánicos, y nuestra misión es explicar a los inspectores qué se puede hacer para identificar estos asuntos y cómo resolverlos.
Jochen dio un panorama desde la UE de cómo cambiará el sector con la revisión del nuevo reglamento europeo orgánico (2018/848), que entrará en vigor el 1 de enero de 2021. Recordó que el primer reglamento se creó en 1991 y era de apenas 15 páginas; ahora son 175 páginas. Hay una gran cantidad de reglas a cumplir, en México los inspectores tienen que conocer la regulación mexicana, las europeas, las de EU, las de Canadá, las de Japón, etc. “Es un mundo un poco complicado”.
Miles, quien de 2009 al 2017 encabezó el NOP y hoy trabaja como consultor independiente en temas de normas, certificación y acreditación, consideró que en México hay agentes de certificación que están muy fuertes para proveer el control del sistema orgánico, como CERTIMEX, desde la finca hasta el mercado. No obstante, matizó, en todos los sistemas de control se necesita mejorar porque hay problemas y ahí está la tarea de inspeccionar y certificar para proteger la integridad de la agricultura orgánica.
El director ejecutivo de CERTIMEX, Taurino Reyes Santiago, añadió que otros objetivos del curso fueron fortalecer los conocimientos y habilidades para la inspección de alimentos procesados orgánicos; conocer los requisitos sobre ingredientes, aditivos, auxiliares de procesamiento, sanitizantes, detergentes; reforzar el conocimiento sobre trazabilidad, balance de masas y realizar práctica de inspección en planta de procesamiento de alimentos orgánicos para las diferentes normas que actualmente certifica la certificadora mexicana.