Elaboran plan agroecológico para sustituir agroquímicos

Para revertir el modelo agronómico de los últimos 60 años, la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) desarrolla un plan para incentivar la agroecología, el respeto y la conservación del patrimonio biocultural del país, y proteger la vida de los mexicanos ante el embate de alimentos producidos con pesticidas y agroquímicos.
Para la Semarnat, el tema de los alimentos sanos y de calidad está íntimamente ligado con la protección del medio ambiente. Es la única alternativa para transformar la agricultura campesina y la moderna industria en una actividad con fundamentos ecológicos.
Para ello, la dependencia elabora el Programa Nacional de Transición Agroecológica y Patrimonio Biocultural.
Ramón Mariaca Méndez, responsable del área de Agroecología y Patrimonio Biocultural, explicó que este programa será validado por la sociedad a través de su participación en talleres, los cuales serán apoyados por la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), organismo internacional que trabaja de la mano con la dependencia.
El Programa Nacional de Transición Agroecológica y Patrimonio Biocultural lo conforman 5 ejes: Del conocimiento y educación agroecológica y de patrimonio biocultural; Uso y manejo sustentable del territorio; Disminución del riesgo socioambiental; Gobernanza para la transición y, Difusión.
Cada uno de ellos cuenta con estrategias y acciones que, entre otros objetivos, buscan establecer los conceptos de agroecología y patrimonio biocultural en los instrumentos de política pública ambiental tanto jurídicos como institucionales.
Asimismo, se trabajará en valorar y fomentar el conocimiento y cultura de los pueblos originarios sobre el manejo de sus recursos naturales, así como el de campesinos tradicionales y de organizaciones comunitarias y regionales.
Finalmente, señaló Mariaca Méndez, se tiene que convencer a la sociedad en general a lograr cadenas cortas y justas de comercialización de los productos agrícolas, donde el principal beneficiario de la producción agropecuaria y forestal sea el propio productor, su familia, su campo y su cultura, no los intermediarios.
En este programa nacional está presente la defensa del maíz como parte de nuestra cultura e incluye también la atención a la grave crisis que estamos enfrentando con la desaparición de los polinizadores, además del programa para lograr la prohibición paulatina de la importación del glifosato y otros agroproductos terriblemente dañinos para la salud humana y ambiental.
Ramón Mariaca enfatizó que hoy más que nunca urge reforzar la agroecología y exaltar la defensa y conservación de nuestro patrimonio biocultural nacional, sobre todo debido a esta pandemia que hoy enfrentamos: “debe hacernos reflexionar sobre nuestra relación con la naturaleza. Sin duda es un llamado de atención”, aseguró.