Propone Ejecutivo presupuesto rural de 362 mil 546 mdp
El presupuesto que el Ejecutivo Federal propuso para el Programa Especial Concurrente para el Desarrollo Rural Sustentable (PECDRS) es de 362 mil 546 millones de pesos (mdp), ligeramente superior al aprobado por la Cámara de Diputados el año pasado, que fue de 335 mil 227 mdp y ya modificado sumó 336 mil 970 mdp.
El Proyecto de Presupuesto de Egresos de la Federación (PPEF) entregado ayer a los diputados, detalla que para la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (Sader) se canalizarían 53 mil 088 mdp (poco más de los 49.2 mil mdp de 2021); para Sedatu 12 mil 868 mdp; la Semarnat, 40 mil 795 mdp y la Secretaría del Bienestar, 296 mil 858.
Cabe mencionar que el PECDRS se ha mantenido como inercia de administraciones pasadas y ni el Ejecutivo ni los legisladores han modificado lo que sigue siendo una suma de programas y presupuestos que no tienen una definición clara de sus objetivos en los territorios rurales; aunque en el proyecto del Ejecutivo para 2022 se enuncian algunas orientaciones generales que se puntualizarán más adelante.
El PPEF indica que en el ramo 08 Agricultura y Desarrollo Rural se contempla destinar 9 mil 406 mdp, de los cuales el Programa de Abasto Social de Leche a cargo de Liconsa tendrá 283 millones 209 mil pesos; el Programa de Abasto Rural de Diconsa mil 113 mdp; Precios de Garantía a Productos Alimentarios Básicos poco más de 565 millones de pesos; Producción para el Bienestar, 7 mil 329 mdp; y el Programa de Fomento a la Agricultura, Ganadería, Pesca y Acuicultura,114 millones 981 mil pesos.
El ramo 16 Medio Ambiente y Recursos Naturales contará con 3 mil 215 mdp, de los que Infraestructura de agua potable, alcantarillado y saneamiento absorberá más de mil mdp; Infraestructura para la modernización y rehabilitación de riego y temporal tecnificado, 642 millones 898 mil pesos; Planeación, Provisiones para la infraestructura hidroagrícola para Pueblos Indígenas, 692 millones 294 mil;
Programa de Conservación para el Desarrollo Sostenible, 44 millones 271 mil; Agua Potable, Drenaje y Tratamiento, 223 millones 982 mil; Programa de Apoyo a la Infraestructura Hidroagrícola, 211 millones 715 mil; y Apoyos para el Desarrollo Forestal Sustentable, 318 millones 392 mil.
En el caso del ramo 20 Bienestar el presupuesto del Ejecutivo contempla 60 mil 707 mdp, de los que el Programa de Apoyo para el Bienestar de las niñas y niños, hijos de madres trabajadoras, 370 millones 788 mil pesos; Pensión para el Bienestar de las Personas Adultas Mayores más de 35 mil 489 mdp y Sembrando Vida, 24 mil 846 mdp.
Lineamientos del presupuesto para el campo
El artículo 31 del PPEF para 2022 se establece que el ejercicio de los recursos estará sujeto a ciertos lineamientos: “políticas públicas orientadas a incrementar la producción, la productividad y la competitividad agroalimentaria y pesquera del país, a la generación del empleo rural y para las actividades pesqueras y acuícolas, a promover en la población campesina y de la pesca el bienestar, así como su incorporación al desarrollo nacional, dando prioridad a las zonas de alta y muy alta marginación y a poblaciones indígenas”.
Habla de impulsar
una agricultura más incluyente, pero con políticas diferenciadas para cada una de las regiones del país, al tiempo que se oriente prioritariamente hacia las pequeñas unidades de producción y al apoyo de los pequeños productores; que procuren la progresividad en el otorgamiento de los incentivos”.
Además, “el presupuesto para el campo procurará fomentar el abasto de alimentos y productos básicos y estratégicos a la población, promoviendo su acceso a los grupos sociales menos favorecidos y dando prioridad a la producción nacional”.
Hace referencia a que se deberá mejorar e incrementar la productividad, cerrando las brechas existentes; potenciar la contribución de la agricultura al desarrollo de los territorios rurales y al bienestar de las personas que los habitan; mejorar la capacidad de la agricultura para adaptarse al cambio climático, mitigar la emisión de gases de efecto invernadero y mejorar la utilización y preservación de los recursos naturales y la biodiversidad; incrementar la contribución de la agricultura nacional a la seguridad alimentaria de todas las personas.
El proyecto del Ejecutivo también señala que “se procurará que los recursos destinados a competitividad, se orienten principalmente a las pequeñas unidades de producción, que se dedican a los productos básicos y estratégicos”.
Destaca la aplicación de innovaciones y desarrollos tecnológicos disponibles y su vinculación con los centros de investigación, así como la transferencia de tecnología del país, mediante servicios de extensionismo que aseguren la incorporación del pequeño productores a estas innovaciones.
Añade la necesidad de ampliar la oferta de bienes y servicios públicos, particularmente en materia de infraestructura, investigación y desarrollo, capacitación, extensionismo rural e información;.
Hace énfasis en que las acciones deberán contribuir a la sustentabilidad de las actividades agropecuarias, pesqueras y acuícolas en lo referente al aprovechamiento responsable del agua y la tierra.
Anota que impulsará “la producción y productividad en el sector mediante el fomento de proyectos integrales que consideren la tecnificación del riego y el uso de insumos (semillas, fertilizantes, biofertilizantes y prácticas agrícolas sustentables, entre otros)”.
