Urge proteger la biodiversidad y reforzar el papel de los pueblos indígenas
El secretario general de las Naciones Unidas, António Guterres, declaró este martes que quienes se lucran de la naturaleza “no pueden tratarla como un recurso gratuito e infinito”.
“Deben dar un paso al frente y contribuir a su protección y restauración”, insistió Guterres durante su intervención en la reunión de alto nivel de la Cumbre de biodiversidad (COP16) celebrada en Cali, Colombia, en la que ha sido adoptada la Declaración de la Coalición Mundial por la Paz con la Naturaleza.
El titular de la ONU recordó la urgencia de capitalizar adecuadamente el Fondo del Marco Mundial para la Biodiversidad y establecer nuevos compromisos para movilizar otras fuentes de financiación pública y privada.
Adoptado en 2022 en Montreal, el Marco global de Biodiversidad Kunming-Montreal establece objetivos para proteger la naturaleza que requieren sólidos mecanismos de seguimiento y movilizar al menos 200,000 millones de dólares al año de aquí a 2030.
“Debemos cambiar a modelos empresariales y de producción positivos para la naturaleza: energías renovables y cadenas de suministro sostenibles; políticas de cero residuos y economías circulares; agricultura regenerativa y prácticas agrícolas sostenibles. Deben convertirse en la norma tanto para los gobiernos como para las empresas”, señaló a este respecto.
Defender a los defensores de la naturaleza
El secretario general pidió el establecimiento de un órgano que garantice “que las voces indígenas sean escuchadas”, destacando su papel, el de los afrodescendientes y las comunidades locales como guardianes de la naturaleza.
“Con demasiada frecuencia, han estado al margen de la política medioambiental mundial. Con demasiada frecuencia, los defensores del medio ambiente han sido amenazados y asesinados”, dijo Guterres, asegurando que la paz con la naturaleza significa paz para quienes la protegen.
“Debemos defender a las personas que defienden la naturaleza”, añadió.
Asimismo, Guterres reiteró que ningún país, rico o pobre, es inmune a la devastación provocada por el cambio climático, la pérdida de biodiversidad, la degradación de la tierra y la contaminación.
Los motores de destrucción, prosiguió, están arraigados en modelos económicos obsoletos, que alimentan patrones insostenibles de producción y consumo.
Hagamos las paces con la naturaleza
“Sabemos que es posible avanzar. Muchos países de todo el mundo están tomando la iniciativa”, dijo Guterres citando a Brasil, Colombia, Indonesia y Malasia como un ejemplo a seguir por sus esfuerzos para frenar la deforestación y a la cuenca del Congo por sus medidas para aumentar la cobertura de áreas protegidas.
En el ámbito legislativo, el Secretario General hizo referencia a la ley de Restauración de la Naturaleza de la Unión Europea.
“Podemos -y debemos- salvaguardar los ecosistemas que nos sustentan”, dijo Guterres. “Cualquier otro camino es impensable. La supervivencia del planeta -y la nuestra propia- depende de ello. Elijamos sabiamente. Elijamos la vida. Hagamos las paces con la naturaleza”, concluyó.