La raicilla es una bebida alcohólica de origen 100 por ciento mexicano que se produce en Jalisco, cuya gradación oscila entre 36 y 45 por ciento de alcohol, considerada la “prima” del mezcal y del tequila.
Esta bebida jalisciense puede someterse a distintos tratamientos para dar origen a diversas clases: joven blanco o plata, envejecida o madurada en vidrio, reposada u oro y añejada, entre otras más.
Para su elaboración primero se escogen las piñas maduras, luego se jiman, limpian y tateman. Después se cuecen en hornos sellados que arden a 130 grados centígrados, para luego enfriar, limpiar de nuevo y moler. El líquido resultante se fermenta máximo ocho días, después se vierte todo a los alambiques (instrumento de destilación de cualquier sustancia líquida a través de un proceso de evaporación y condensación) para cocer y finalmente se destila.
En junio de 2019, la raicilla obtuvo la denominación de origen, gracias al impulso que el Instituto Mexicano de la Propiedad Intelectual (IMPI) y el Consejo Regulador del Tequila, dieron para que esta bebida se sume a la lista de productos mexicanos que ostentan este título.
Lo anterior se dio a conocer en el marco de la primera edición del Raicilla Summer Fest 2024, que se realizará los días 30, 31 de agosto y 1 de septiembre en la comunidad de San Gregorio en el municipio de Mixtlán, Jalisco.
Los asistentes podrán disfrutar de un gran evento cultural, gastronómico y musical en honor a la raicilla. Las actividades van desde recorrer los campos de lechuguilla y conocer las tabernas tradicionales, hasta convivir frente a frente con las y los maestros raicilleros, quienes darán una cátedra sobre la elaboración de esta bebida emblemática.
