Llama la FAO a romper el ciclo de la pobreza rural
Roma – Diversas figuras clave en la lucha mundial contra el hambre se reunieron hoy en la Expo de Milán para celebrar el Día Mundial de la Alimentación -que coincide con el 70 aniversario de la fundación de la FAO- e instaron a intensificar los esfuerzos para erradicar el hambre y mejorar la forma en que producimos y consumimos los alimentos.
El Director General de la FAO, José Graziano da Silva, agradeció a los agricultores, pescadores, silvicultores y otros trabajadores de los sectores alimentario y agrícola en el mundo su contribución al “increíble logro” de haber incrementado la producción de alimentos para todos, a pesar de que la población mundial se ha triplicado desde 1945.
Con cerca de 800 millones de personas que aún sufren subalimentación, nos enfrentamos a dos grandes desafíos, afirmó ante los dignatarios reunidos -entre ellos el Presidente de Italia, Sergio Mattarella, el de Eslovenia Borut Pahor, y la Reina Letizia de España, Embajadora especial de la FAO para la nutrición.
“En primer lugar, tenemos que convertir rápidamente la mayor disponibilidad de alimentos en una mejor nutrición para todos. En segundo lugar, debemos acelerar la transición de la producción y consumo de alimentos hacia sistemas verdaderamente sostenibles”, señaló Graziano da Silva.
“Una buena alimentación -añadió- es una de las mejores fuentes de crecimiento económico y contribuye a la paz y la estabilidad”.
Refiriéndose al tema del Día Mundial de la Alimentación de este año La protección social y la agricultura: romper el ciclo de la pobreza rural, aseguró que “la producción y el crecimiento económico no resuelven por sí solos el problema, si las personas que pasan hambre continúan excluidas. India, Brasil, Etiopía y otros países nos demuestran que empoderar a las personas muy pobres para que compren alimentos puede ser una vía asequible para erradicar el hambre”.
“Los países industrializados hicieron lo mismo para acabar con el hambre generalizada tras la Segunda Guerra Mundial”, subrayó. “El programa de cartillas alimentarias en los Estados Unidos de América es uno de los mejores ejemplos”.
La protección social permite que las personas que pasan hambre se “empoderen para escapar de ella con su propio esfuerzo, y lleven una vida digna y productiva”, según el responsable de la FAO.
“Más que falta de alimentos, el hambre es una terrible injusticia”, afirmó por su parte el Secretario General de las Naciones Unidas, Ban Ki-moon, en su discurso. “Estamos aquí para crear un movimiento global para erradicar el hambre. Tenemos que forjar nuevas alianzas y concebir mejores formas de trabajar”.
El Secretario General de la ONU hizo hincapié en la magnitud de las pérdidas y el desperdicio de alimentos, estimados en un tercio del total de los producidos a nivel mundial. “Todo el mundo sabe que el desperdicio es una vergüenza”, dijo.
El Papa elogia la labor de la FAO sobre la protección social
En un mensaje el Papa Francisco afirmó que el hambre se debe por una parte a un “reparto injusto de los frutos de la tierra” y también a un desarrollo agrícola inadecuado, motivando que el mandato de la FAO sea más urgente que nunca.
El Pontífice advirtió que los nobles ideales no serán suficientes, ya que los repartos injustos generan violencia de una forma u otra. “Tal vez la verdadera pregunta -afirmó- es si aún resulta posible concebir una sociedad en la que los recursos están en manos de unos pocos, mientras que los menos favorecidos se ven obligados a conformarse únicamente con las migajas”.
Las ayudas a los ingresos básicos pueden aumentar la resiliencia de las personas más vulnerables y permitirles hacer un mejor uso de sus escasos recursos, lo que a su vez puede posibilitar que todo el mundo entienda el “verdadero significado de la utilización sostenible de los recursos naturales”, concluyó el Papa.
Acción conjunta y compromisos personales
“Los alimentos y el agua son el lenguaje universal de los seres humanos”, indicó Sergio Mattarella, Presidente de Italia -que alberga la sede de la FAO desde 1951-, en su discurso inaugural del Día Mundial de la Alimentación.
“Alimentar al planeta es esencial para la paz”, afirmó Mattarella. “Solamente la acción conjunta puede garantizar la seguridad alimentaria y la utilización sostenible de los recursos naturales. La acción unilateral no da buenos resultados”.
En el evento de hoy participaron también como ponentes los Ministros de Asuntos Exteriores y Agricultura de Italia, el Presidente del Fondo Internacional de Desarrollo Agrícola (FIDA) Kanayo F. Nwanze, la Directora Ejecutiva del Programa Mundial de Alimentos (PMA) Ertharin Cousin y el alcalde de Milán, Giuliano Pisapia.
Alcanzar los nuevos objetivos de desarrollo sostenible -y convertirse en la Generación Hambre Cero- depende en última instancia de todos, y no solamente de los gobiernos, afirmó Graziano da Silva al elogiar la Carta de Milán y la temática de la Expo de Milán, centrada en la alimentación.
Los ciudadanos pueden celebrar el Día Mundial de la Alimentación asumiendo “compromisos personales como, por ejemplo, comer sano, reducir el desperdicio de alimentos y ayudar a los demás”, concluyó el Director General de la FAO.